Rechazamos la instalación de la base yanqui, no renunciaremos a nuestros derechos ni soberanía. No entregamos nuestros bienes naturales, subrayan los manifestantes, quienes partirán desde el icónico monumento al libertador José de San Martín hasta el predio donde quieren instalar la base.
La multisectorial, integrada por organizaciones no gubernamentales y partidos políticos, ha expresado su claro rechazo a la construcción de instalaciones en la zona de la meseta de Neuquén.
Asimismo, repudian el argumento del gobierno provincial de que los fondos millonarios logrados del programa humanitario del Ejército de Estados Unidos permitirán la ejecución de un centro de emergencias especializado de Defensa Civil, con posibilidades de incorporar un helipuerto para emergentología.
‘Le cedieron un predio cerca del aeropuerto y en la ruta del petróleo’, resaltó la Multisectorial en un comunicado, en el cual se hace eco el portal de noticias https://www.rionegro.com.ar/.
Por otra parte, recordaron que en las provincias de Misiones y Jujuy continúa la resistencia para la construcción de bases yanquis, mientras que en Tierra del Fuego, fue rechazada.
En una entrevista con el medio Resumen Latinoamericano, el periodista Pablo Fernández, de Cartago TV, precisó que no es una base con militares.
Pero, en caso de algún conflicto relacionado con apersonarse, o estar ahí, con unidades de despliegue rápido, con cuestiones médicas, de salubridad, algún problema climático, ellos te dan aportes, agregó Fernández.
‘Si hay una inundación, problemas fuertes como pueden ser terremotos, bueno ahi tienes la unidad de despliegue rápido con tecnología de última generación para esa incontinencia climáticao desastres ambientales’, añadió.
Fernández explicó que varias organizaciones piden al gobierno provincial informe qué está sucediendo.
En una parte del texto que presentaron en un amparo, subrayan que hay que tener acceso a la información pública relacionada a la base que se instalará, conforme a la dicho públicamente por el gobierno provincial y el gobierno estadounidense que se construiría con fondos provenientes del país del norte, en específico del Comando Sur.
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