Esos grupos pretenden también evitar los procesos judiciales contra los protagonistas del golpe de Estado de noviembre de 2019, añadió el experto en entrevista con la radio Kausachun Coca.
‘La derecha racista, fascista, violenta y sin propuesta, se reorganiza en un intento por lograr la impunidad ante las acusaciones por las masacres de Senkata y Sacaba y, de ser posible, imponer un nuevo golpe de Estado en el país’, subrayó.
Richter recordó a los dirigentes cívicos que llamaron ‘bestias humanas’ a trabajadores y consideraron que la wiphala no los representa, ‘se radicalizaron e intentan construir una fuerza política autodenominada defensora de la democracia’.
Ese llamado viene precisamente de aquellos ‘que interrumpieron un proceso democrático, generaron una ruptura institucional, produjeron un golpe de Estado e intentaron imponer el modelo neoliberal’, señaló el analista.
Los responsables también de instalar un gobierno inconstitucional, de las muertes de Senkata y Sacaba, establecen ahora una alianza para que la justicia no los pueda alcanzar, insistió.
Richter estimó que esas personas luchan para disipar la verdad, ‘para que las realidades que vivimos con angustia en noviembre y diciembre de aquel año sean únicamente eventos coyunturales, anecdóticos de un momento de inestabilidad’.
Según el experto, esos sectores impulsan un movimiento social para escapar a sus responsabilidades, el cual movilizan a través de marchas, politizan con su presencia y desvirtúan la problemática real de los pueblos indígenas.
Asimismo, afirmó que esos grupos ‘reactivan sus formas de lucha contra el gobierno y desconocen la recomposición de legitimidades y las proporcionalidades de representación y poder establecidas por el proceso electoral de octubre pasado’.
Las declaraciones del analista siguieron a la citación por la Fiscalía de Luis Fernando Camacho para que esclarezca su rol en el golpe de Estado de 2019, a la cual seguidores del político derechista respondieron con una movilización y un paro cívico.
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