Gran conmoción causó el deceso del realizador cinematográfico, escritor y político, quien fungió al frente de la Secretaría de Cultura entre 2009 y 2014 y también como titular del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) desde 2002 a 2005.
‘Lo conocí cuando todavía no lo conocía, a través de su película Mirta, de Liniers a Estambul: el retrato de una generación marcada por la tragedia y el exilio. Jorge Coscia, gran secretario de Cultura, artista y, sobre todo gran compañero. Mis condolencias a su familia y amigos’, apuntó Fernández en un mensaje en su cuenta oficial en twitter.
Desde el Incaa, donde dejó su huella, esa Institución expresó su tristeza por la pérdida física de Coscia y recordó su amplia trayectoria también como diputado nacional y miembro integrante de la Comisión Directiva de DAC (Directores Agrentinos Cinematográficos) cuando se gestó la Ley de Cine.
En tanto, el Ministerio de Cultura despidió a un hombre que ‘desarrolló su compromiso por la cultura de nuestro pueblo en los diversos espacios que transitó. Acompañamos en este momento de dolor a sus familiares y amigos’.
Varios ministros, artistas y amigos resaltaron el compromiso y entrega de Coscia y su amor por el séptimo arte, entre ellos el realizador Víctor Laplace, quien trabajó junto a él en Chorros (1987) y Mirta, de Liniers a Estambul (1987). Me siento conmocionado. Fue un hombre valioso, sensible, con una trayectoria impecable, dijo.
Fallecido tras una prolongada enfermedad, durante su destacada trayectoria fue condecorado en el Festival de Cine Latinoamericano de La Habana, en Huelva, y además recibió el Grado de Caballero en la Orden de las Artes y las Letras en marzo de 2007 por el presidente de Francia.
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