Al término de 15 horas de negociación en el Ministerio de Trabajo las partes en conflicto concordaron las bases para un convenio colectivo que la empresa belga rechazó satisfacer durante semanas previas.
El Sindicato Unido Portuario y Ramas Afines (Supra) comenzó desde el pasado 28 de septiembre un movimiento similar de reclamo que detuvo las operaciones de la Terminal de Contenedores, cuyo monopolio concedió el gobierno a Kaoten Natie.
Supra consiguió la garantía de un mínimo de 13 jornales asegurados para los nuevos ingresos en plantilla, mientras que para quienes ya cuenten con más tiempos en plazas pasarán a 15.
Durante el primer paro de semanas atrás la gremial también protestó la concesión a la multinacional del 80 por ciento de las acciones de la Terminal Cuenca del Plata (TCP) por 50 años más.
Por este motivo la bancada legislativa del Frente Amplio convocó a interpelación parlamentaria al actual ministro del Interior, Luis Alberto Héber, por negociar y firmar el trato a principios de año cuando ocupaba la cartera de Transporte.
La fuerza opositora presentó además en Fiscalía una denuncia penal contra ese funcionario, el prosecretario presidencial, Rodrigo Ferrés y el presidente de la Autoridad Nacional Portuaria, Juan Curbelo, por presunta comisión de delitos de agresión a la soberanía y usurpación de atribuciones constitucionales.
Asimismo reclamó al Poder Ejecutivo la nulidad del decreto que convalida el cuestionado acuerdo.
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