Un informe de la Defensoría de la Niñez, publicado este lunes, reveló que mil 314 niños y adolescentes de entre 14 y 17 años sufrieron violaciones de sus derechos humanos en las protestas de 2019, y 35 por ciento de ellos presentaron traumas oculares.
El organismo identificó a los Carabineros (policía militarizada) con el 83 por ciento de los delitos denunciados, seguido por el Ejército (3), Policía De Investigaciones (2,5) y la Armada (0,5).
Del total de las causas sólo siguen vigentes en el Ministerio Público 29 por ciento y de ellas apenas el uno por ciento tiene a algún funcionario policial formalizado por estos hechos, declaró la Defensoría.
Esto ‘es una expresión evidente de impunidad’, afirmó la Defensora de la Niñez, Patricia Muñoz, quien lamentó la falta de respuestas contundentes de un sistema que debe, no solo asegurar la diligencia en la investigación, sino también la sanción coherente y proporcional con el daño que implica.
El presidente de la Comisión Chilena de Derechos Humanos, Carlos Margotta, coincidió con Muñoz en las deudas pendientes en esa materia, al conmemorarse este 18 de octubre el segundo aniversario del estallido social.
‘En lo central, la represión policial continúa y el gobierno sigue aplicándola sin atención a las recomendaciones internacionales’, afirmó el abogado, entrevistado por Radio Universidad de Chile.
Por otra parte, dijo, los organismos encargados de investigar, juzgar y sancionar a los responsables de la violación masiva, grave y sistemática de los derechos humanos aplicada por este gobierno para detener la protesta social, no han cumplido su deber.
Margotta consideró que, si bien se avanzó en el proceso hacia una nueva Constitución, todavía está vigente la carta magna impuesta por la dictadura y se siguen desconociendo derechos fundamentales como el acceso a la educación, la salud y la seguridad social.
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