Durante la reunión, con sede de la ciudad noruega de Tromso, el funcionario instó a fortalecer los vínculos en la región a través de los organismos que los unen como el Consejo Ártico, el Consejo de los Estados del Mar Báltico, el Consejo Nórdico de Ministros.
‘Para nuestros países, la cooperación de Barents sigue siendo una especie de hilo conductor y un importante canal de diálogo’, significó, según el sitio web del servicio de prensa diplomático ruso.
Destacó que los países miembros del Consejo pueden discutir temas clave para la región de manera empresarial y constructiva, sin estar sujetos a fluctuaciones en el entorno político.
‘Para abordar los desafíos que enfrentamos, es importante una estrecha coordinación’, apuntó el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, quien propuso reanudar la práctica de las reuniones de todos estos formatos del norte a nivel político, indicó la agencia de noticias TASS.
Llamó a fomentar el intercambio también en el marco del programa Dimensión Septentrional, compartido por Rusia, Noruega, Islandia, Finlandia y Suecia y la Unión Europea para el desarrollo de zona ártica del continente.
En otra parte de su discurso, Lavrov advirtió que la lucha contra la propagación del coronavirus SARS-CoV-2 estableció una nueva dimensión a la cooperación sanitaria multilateral y subrayó que la recuperación socioeconómica después de la pandemia es también es una prioridad común.
El jefe de la diplomacia recordó que el cambio climático es uno de los desafíos más urgentes para la región y subrayó la importancia de la puesta en práctica del Plan de Acción actualizado para la Cooperación de Barents, le cual implica la puesta en práctica de proyectos que tengan en cuenta los aspectos climáticos.
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