Anoche, en el comienzo de la edición 117 del Clásico de Otoño de las Grandes Ligas, el pitcher de 37 años abandonó el montículo en el estadio Minute Maid Park de Houston después de ponchar al camarero venezolano José Altuve por segunda vez al iniciar el tercer capítulo.
Un fuerte batazo del inicialista cubano Yulieski Gurriel en el segundo episodio provocó la fractura en la pierna derecha de Morton, quien se presentó en gran forma ante su antiguo equipo, con la bola rápida entre 95 y 97 millas por hora y su devastadora curva de nudillos.
La baja del campeón de la Serie Mundial de 2017 con Astros y ganador de siete partidos de postemporada se suma a la pérdida por lesión a mitad de campaña de la súper estrella venezolana Ronald Acuña, por lo que merecería el calificativo de proeza si la novena de Georgia logra conquistar una corona que le es esquiva desde 1995.
En declaraciones a la prensa tras la victoria 6-2 de Bravos, el manager Brian Snitker elogió el coraje y las ganas de ayudar al equipo de Morton, quien después de la conexión de Gurriel que le fracturó el peroné sacó dos outs en el segundo inning y uno en el tercero.
Según el mentor, Bravos ha pasado por difíciles momentos en la campaña, y sus jugadores no se han amilanado y están dispuestos a pelear.
‘Hemos lidiado con problemas muchas veces este año, me refiero a perder a un componente clave del club, pero vamos a seguir, eso no será una excusa y saldremos a ganar los juegos’, subrayó.
Para la noche de hoy está señalado el segundo desafío de la Serie Mundial, en el propio Minute Maid Park de Houston, con el zurdo Max Fried encargado de poner en ventaja 2-0 a Atlanta y el derecho mexicano de Astros José Urquidy con la misión de emparejar el duelo.
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