El principal responsable de la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura intervino en las sesiones sobre Cambio Climático y Medioambiente y en la de Desarrollo Sostenible de la Cumbre de las 20 naciones más industrializadas del mundo (G-20) que durante dos días se celebró en esta capital.
“El cambio climático comprometerá nuestra capacidad de producir cantidades suficientes de alimentos nutritivos, con lo que aumentará la pobreza y se agravarán las desigualdades”, alertó QU, acorde con un comunicado de ese organismo internacional el cual resumió sus intervenciones.
Precisó también que los sistemas agroalimentarios de todo el mundo se ven amenazados por una serie de factores que van desde conflictos civiles a la pérdida de biodiversidad y la pandemia de la Covid-19.
Situaciones que, añadió, llevaron a que más de 800 millones de personas al hambre crónica, mientras otros tres mil millones están privadas de tener una alimentación saludable.
“No vamos camino de limitar el aumento de la temperatura mundial a 1,5 ºC”, expresó QU y más adelante recordó que apenas quedan solo nueve campañas agrícolas hasta el 2030, recha prevista para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
La urgencia de la acción por el clima es más extrema que nunca, enfatizó e instó a los políticos a “asumir un liderazgo más firme, las personas tienen que responsabilizarse y toda la sociedad debe trabajar en asociación de forma coherente basándose en la ciencia y la innovación”.
Entre otros aspectos destacó que la FAO está firmemente comprometida a trabajar junto con sus miembros y asociados a favor de la consecución de la Agenda 2030 y los ODS.
Como acciones fundamentales de ese organismo, entre otras, citó impulsar las inversiones públicas y privadas, aumentar el acceso de los agricultores y las personas vulnerables a infraestructura adecuada y recursos financieros.
Hizo hincapié en qué concretamente debe hacerse para que los sistemas agroalimentarios sean “más eficientes, más inclusivos, más resilientes y más sostenibles”.
Relacionó en tal sentido la importancia de “creer en la ciencia, aprender la ciencia y aplicar la ciencia”, además de la renovación de los modelos operativos, al tiempo que calificó a “la ciencia, la tecnología y la metodología son nuestras soluciones definitivas”.
De igual modo hizo referencia a lo que llamó las cuatro erres (reducir, reutilizar, reciclar y reponer) las que definió “deberían ser el punto cardinal de los responsables de las políticas”.
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