Recibir atención sanitaria debería ser un derecho, afirmó el mandatario en su cuenta oficial en Twitter, donde sugirió inscribirse en un programa para comprar un seguro antes del 15 de diciembre.
Algunos usuarios criticaron que ninguno de los planes ofrecidos eran asequibles y si la salud era un derecho no deberían pagar para tener acceso a ella.
La atención médica universal es el camino a seguir, escribió uno de los internautas, mientras otro subrayó que pagar sumas ridículamente altas a compañías de seguros con fines de lucro solamente beneficia a esas empresas.
El plan de inversiones sociales impulsado por la Casa Blanca incluía cuestiones como la reducción de los precios de medicamentos con receta, así como cobertura dental y oftalmológica para beneficiarios del programa de seguros Medicaid.
Sin embargo, esos beneficios quedaron fuera del paquete como parte de las negociaciones entre los legisladores demócratas que rebajaron los fondos del plan de 3,5 billones a 1,75 billones en aras de ganar apoyo de algunos miembros del partido opuestos a la propuesta inicial.
Pese a la reducción, la iniciativa -aún estancada en el Congreso- abarca medidas para reducir las cuotas de los estadounidenses que compran un seguro a través de la Ley de Cuidado de Salud Asequible y la inclusión de los servicios de audición para beneficiarios de los seguros Medicare.
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