Por medio de un comunicado difundido aquí por la oficina de su portavoz, el titular señaló que no se trata de números en una página, son vidas truncadas por un virus despiadado que no respeta fronteras. Este hito devastador recuerda, además, que estamos fallando a gran parte del mundo: si bien los países ricos lanzan terceras dosis de inmunizantes antiCovid-19, solo alrededor del cinco por ciento de las personas en África están completamente vacunadas, recalcó.
A juicio del máximo representante de Naciones Unidas, esto es una vergüenza mundial y no se puede bajar la guardia mientras muchos siguen muriendo debido a la enfermedad ocasionada por el SARS-CoV-2.
Todavía hay hospitales superpoblados y trabajadores sanitarios exhaustos, en tanto persiste el riesgo de que nuevas variantes se propaguen y cobren más vidas, apuntó.
Otras amenazas continúan igualmente vigentes, como la desinformación sobre la Covid-19, la acumulación de dosis y el nacionalismo de vacunas, y la falta de solidaridad global, indicó el diplomático portugués, quien se encuentra ahora en Reino Unido para la Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático.
Guterres pidió a los líderes internacionales apoyar plenamente la estrategia global de vacunación que lanzó junto a la Organización Mundial de la Salud el mes pasado.
“Necesitamos poner las vacunas en los brazos del 40 por ciento de las personas en todos los países para fines de este año, y del 70 por ciento para mediados de 2022.”
Actualmente, enfatizó el secretario general de la ONU, sería un error pensar que la pandemia ha terminado, aunque las restricciones se alivian en muchos lugares, urge combinar las vacunas con la vigilancia a través de medidas como el uso de mascarillas y el distanciamiento social.
Según destacó, la mejor manera de honrar a esos cinco millones de personas perdidas y apoyar a los trabajadores de la salud que luchan contra este virus todos los días, es hacer realidad un acceso equitativo a las vacunas y cumplir todas las medidas sanitarias.
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