El hecho, denunciado hace un año, ocurrió en el CAI San Mateo de la localidad capitalina Soacha, cuando un incendió cobró la vida a los muchachos que estaban en la sala de retenidos de dicha estación policial.
«Por más delitos que tú hayas cometido, nada justifica la justicia por mano propia. Nada justifica una hoguera humana», sostuvo el concejal tras la denuncia.
En la tragedia del 4 de septiembre, murieron incinerados ocho jóvenes que estaban detenidos con quemaduras del 90 por ciento en su cuerpo.
Varios familiares se encontraban presentes el día en que sucedieron los hechos y afirmaron que nos les permitieron ingresar a la visita programada.
Muchas madres, esposas e hijos vieron cómo se quemaban los jóvenes y cómo la policía no permitió que se brindara ayuda, además informaron que varias semanas atrás, los detenidos estaban sufriendo tratos inhumanos por parte de los uniformados.
«Celebramos que la justicia esté operando en el caso de la hoguera humana (…). Es muy importante que disminuyamos la impunida», enfatizó hoy el concejal.
Asimismo, manifestó toda su solidaridad con la familia de los jóvenes que han mostrado una fuerza impresionante ante esta tragedia.
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