El diplomático del vecino país, quien no por primera vez hace declaraciones injerencistas, dijo hoy a la prensa que su gobierno estaba preocupado por la reforma eléctrica propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador y que supuestamente la había discutido con funcionarios a quienes no identificó.
Preguntado al respecto tras encabezar una ceremonia por el bicentenario de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Ebrard dijo que lo planteado fue que antes de fijar una postura que no tenga la información del gobierno de México, es importante escuchar qué es y que no es la reforma eléctrica.
Salazar estuvo presente esta mañana en el acto encabezado por Ebrard en la sede de la cancillería pero no en la conferencia de prensa donde el secretario hizo las aclaraciones a lo declarado por el jefe de la misión estadounidense.
Es importante escuchar a México. Se ha dicho mucho, hay cosas que dicen que no es lo correcto. Hubo una primera sesión, habrá otras para cumplir el objetivo de que tengan claro qué es y qué no es la reforma, explicó.
Otro de los objetivos de esos encuentros con el embajador relacionado con esta iniciativa de reforma constitucional es que, al mismo tiempo, el gobierno mexicano desea conocer las inquietudes de diversos sectores estadounidenses sobre el tema.
Queremos escuchar los planteamientos y preocupaciones que le han expresado las empresas de origen estadounidense, para ver cuáles de esos planteamientos son atendibles, cuáles son razonables o cuáles carecen de fundamento o tienen solución de otra forma, subrayó el canciller mexicano.
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