Según destacó en su mensaje por el Día Mundial de Concienciación sobre los Tsunamis, es fundamental impulsar el apoyo a los países en desarrollo y mejorar la detección y la alerta temprana.
Ante la creciente complejidad de las crisis mundiales, insistió, debemos estar mejor preparados y construir resiliencia frente a todos los desastres.
La ciencia y la cooperación internacional, así como la preparación y la acción temprana, deben estar en el centro de nuestros esfuerzos por salvar vidas de tsunamis y otros peligros, subrayó el titular.
Podemos aprovechar el progreso logrado, que va desde una mejor divulgación a las comunidades expuestas a esos fenómenos en todo el mundo, hasta la inclusión de un programa contra los tsunamis en la Década de las Ciencias Oceánicas para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, observó.
Sin embargo, alertó el diplomático portugués, los riesgos continúan siendo inmensos y el aumento del nivel del mar causado por la emergencia climática exacerbará aún más el poder destructivo de los tsunamis.
Frente a esta situación, dijo, debemos limitar el calentamiento a 1,5 grados Celsius sobre los promedios preindustriales e invertir a escala en la capacidad de recuperación de las comunidades costeras.
En diciembre de 2015, la Asamblea General de Naciones Unidas designó el 5 de noviembre como Día Mundial de Concienciación sobre los Tsunamis y pidió a los países promover acciones al respecto y compartir enfoques innovadores para la reducción de riesgo.
Tal fecha fue propuesta por Japón, que debido a su repetida y amarga experiencia con los tsunamis a lo largo de los años ha acumulado una gran conocimiento en áreas como la alerta temprana, la acción pública y la reconstrucción después de un desastre de esas proporciones.
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