En el encuentro participarán los representantes de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y del Reino Unido, que ostenta la presidencia temporal del bloque de naciones más ricas del mundo occidental.
La nueva cepa fue identificada el jueves pasado en Sudáfrica y la Organización Mundial de la Salud la calificó como una variante de preocupación, porque además de ser potencialmente más peligrosa que la Delta, todavía se desconoce si las vacunas contra la Covid-19 logran impedir su propagación.
Aunque muchas naciones cerraron sus fronteras a los viajeros procedentes del país austral africano, la variante Ómicron ya fue detectada en el Reino Unido, Botsuana, Bélgica, Hong Kong, Israel, Alemania, Países Bajos, Italia, Canadá y Australia.
La víspera, el gobierno británico anunció que a partir de mañana se restablecerá el uso obligatorio de la mascarilla en el transporte público y espacios cerrados como tiendas, bancos y oficinas de correos.
Londres también dispuso que desde el martes todos los viajeros que lleguen al país tendrán que hacerse una prueba PCR al segundo día y mantenerse aislados hasta recibir un resultado negativo.
Los contactos de los casos positivos a la variante Ómicron tendrán que autoaislarse durante 10 días, independientemente de si están vacunados o no contra la Covid-19.
Según dijo el primer ministro Boris Johnson el sábado, esas medidas son temporales y preventivas, y serán revisadas dentro de tres semanas.
El Reino Unido, que reportó la víspera 37 mil 681 nuevos casos positivos al coronavirus y otras 51 muertes, acumula más de 10,1 millones de contagios y 144 mil 775 fallecidos desde el inicio de la pandemia.
Hasta el momento, 46,3 millones de personas, equivalentes al 80,5 por ciento de la población mayor de 12 años, recibieron la pauta completa de la vacuna antiCovid-19 y 17,5 millones tienen la dosis de refuerzo.
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