Un clérigo, quien brindó su testimonio a sa publicación bajo condición de anonimato, manifestó que el ataque de los bandidos en la comunidad de Unguwan Gimbiya se prolongó durante más de dos horas.
Otro residente local comunicó que como consecuencia de la embestida, cientos de residentes huyeron de sus residencias hacia otros lugares en busca de mayor seguridad, pese a que fuerzas de seguridad reforzaron el patrullaje en áreas boscosas cercanas al sitio del violento incidente.
En Nigeria son frecuentes los secuestros de personas por entes delincuenciales y extremistas, los cuales exigen pagos en metálico a cambio de la liberación de las víctimas.
Para aniquilar a las bandas armadas y agrupaciones radicales como Boko Haram, las cuales fomentan la violencia en el norte y centro del país, el presidente nigeriano, Muhammadu Buhari, ordenó recientemente a las fuerzas de seguridad que arrecien los ataques contra esas formaciones.
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