El jefe de la delegación iraní, el vicecanciller Ali Baqeri Kani, reiteró que la república islámica aspira a la eliminación total y verificable de las medidas coercitivas impuestas por Estados Unidos contra Teherán.
Las negociaciones nucleares entraron en pausa desde junio último y recomenzaron el pasado 29 de noviembre, aunque el día 3 de diciembre volvieron a detenerse para análisis del resto de los asistentes a la cita con sus respectivas autoridades superiores.
Los dos textos contemplaban la abolición de las sanciones estadounidenses y el regreso de Teherán a lo sellado en el pacto multilateral de 2015.
La anuencia está en crisis por la salida ilegal de Estados Unidos en mayo de 2018 y la reimposición de medidas opresivas a Irán, a las cuales no reaccionaron Reino Unido, Francia y Alemania, signatarios del tratado.
El presidente estadounidense, Joe Biden, declaró en su campaña electoral que la nación norteña volvería al acuerdo, pero hasta ahora sigue la línea de su antecesor, Donald Trump, (2017-2021) con la llamada política de máxima presión.
Las autoridades de la república islámica exigen el levantamiento de ese plan norteamericano y un retorno de todos al origen de lo firmado en 2015.
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