En una conferencia con la prensa internacional, Vásquez no descartó que en el Parlamento se plantee nuevamente una moción de vacancia (cese) del presidente Pedro Castillo, como la fracasada el 7 de diciembre por el pleno congresal, que se negó a debatirla siquiera.
Señaló que el Gobierno ha enviado al Congreso de la República un proyecto de ley para precisar el concepto de vacancia por incapacidad moral y especificar los casos en la que debe declararse.
Llamó al Legislativo a tratar el proyecto con prontitud para “zanjar este problema, de usar y abusar de esta figura, como un arma que puede muchas veces ir en contra de la democracia”.
La primera ministra agregó que el Congreso tiene la obligación política y moral de tratar el proyecto porque la recurrencia de la vacancia da lugar a problemas que afectan a la población.
Según Vásquez, Perú ha vivido cinco años de inestabilidad -marcados por una destitución y varios intentos-, por lo que al Gobierno le preocupa la gobernabilidad, si el Congreso no reflexiona de manera sensata su rol.
Añadió que el Legislativo debe ser consciente de que en Perú hay una democracia en la cual se elige un gobernante cada cinco años y la vacancia está prevista para el caso un jefe de Estado no pudiera gobernar por incapacidad mental (a la que en el siglo XIX se nombraba como moral), por abandono u otra circunstancia.
Precisó que ese mecanismo no es un instrumento para investigar la conducta de un gobernante, porque hay otras vías para denunciarlo e indagarlo.
Añadió que el Congreso está usando el recurso de la vacancia en forma excesiva, como forma de negar el respeto a la voluntad popular y Perú ya conoce los efectos negativos que la medida conlleva para la población y para la atención de sus grandes problemas.
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