Las reuniones sectoriales comenzaron este lunes, a una semana de la designación oficial de la mandataria, entre los representantes de la organización política y los grupos obreros: Confederación Unitaria de Trabajadores de Honduras, la Central General de Trabajadores y la Confederación de Trabajadores de Honduras.
Tras esos encuentros, las agrupaciones presentarán al nuevo ejecutivo sus peticiones y, posteriormente, el equipo técnico analizará y determinará la viabilidad de las mismas y la posibilidad de cumplirlas en los primeros 100 días de la gestión encabezada por Castro.
Desde finales de diciembre y comienzos de enero, Libre mantendrá intercambios con las alianzas campesinas, sindicatos de la enseñanza, trabajadores de la salud, artistas y profesionales del sector económico y recogerá sus demandas sociales presentadas mediante iniciativas y anteproyectos de ley.
El expresidente Manuel Zelaya, uno de los invitados al encuentro con las centrales obreras, afirmó que muchas de sus solicitudes integran el plan del ejecutivo, instalado en la nación centroamericana desde el 27 de enero próximo, fecha del acto de investidura.
De acuerdo con el exmandatario, los proyectos enunciados recibirán el curso de acción correspondiente mediante la concertación de los diferentes poderes estatales y a partir del combate al modelo de privatizaciones neoliberales, capitalistas, patriarcales y excluyentes de la sociedad actual.
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