El gobierno decidió mantener la reanudación del curso y reforzó algunas medidas, pese a reclamos de posponer el retorno que incluyó una carta abierta de 50 médicos, especialistas y enfermeros.
La víspera, el ministro de Educación Jean-Michel Blanquer anunció el nuevo protocolo, que establece que después de detectar un caso de la Covid-19 en una clase, todos sus alumnos deberán someterse a tres pruebas en cuatro días de cara a su reincorporación.
Una vez que la familia haga el primer test, recibirá en las farmacias dos gratuitos para su ejecución en la casa, y los padres deberán certificar que dieron un resultado negativo, precisó.
De igual manera, informó que los profesores cumplirán un protocolo similar si están vacunados, por lo que podrán evitar el aislamiento, garantizando así que la tasa de ausentismo dentro de los maestros no afecte el desarrollo normal del curso.
El estímulo a la vacunación de los niños de cinco a 11 años y la indicación a las autoridades locales para que se ocupen de mejorar la aireación y la captación de dióxido de carbono en las aulas, destacan además en el plan oficial.
Desde sectores de la oposición recibió críticas la comunicación de Blanquer, entre ellas la realizada por el líder comunista y candidato presidencial, Fabien Roussel, quien rechazó que no se discutiera con los educandos el reforzamiento del programa para enfrentar la pandemia en las escuelas.
El regreso a clases tuvo lugar en un tenso escenario, marcado por el diagnóstico de más de 200 mil casos diarios de la Covid-19 y la presencia en los hospitales de cerca de 20 mil pacientes, escenario propiciado por la propagación indetenible de la variante Ómicron del coronavirus SARS-CoV-2.
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