En su opinión para potenciar la productividad en el país entonces si no se revisan los TLC no habrá como recuperar la economía, y no solo en aranceles a confecciones, hay que tomar otras medidas.
Colombia no puede pretender competir con tasas de interés y de acceso al crédito tan grandes como las existente por lo que de ganar la presidencia ahí había que proponer reformas, explicó Robledo
Los TLC se pueden modificar por mutuo acuerdo de las partes o se pueden denunciar y recordó las advertencias hechas en su momento sobre las inconveniencias de esos tratados para Colombia, señaló.
«¿Cómo vamos a competir con Estados Unidos si es un país con subsidios de 50 mil millones de dólares al año en el agro y de 86 mil millones en la industria?», cuestionó.
Hay un problema que si no se modifica no será sostenible, no podemos pedir que nuestros productores compitan con la economía global si lo único que les da el Gobierno son malos tratados, remarcó a Portafolio.
Según sus propuestas de gobierno de cara a las elecciones de mayo próximo, la prioridad económica es derrotar la corrupción.
«Las pérdidas por corrupción son descomunales, pero además yo estoy enfatizando en algo que se menciona poco: gran parte de lo que se roban los servidores públicos y sus compinches se utiliza para corromper el sistema electoral, seguir ganando las elecciones y poder gobernar mal», enfatizó al diario Portafolio.
Robledo considera que se ha destruido la economía nacional, y ese es el principal problema económico pues el país lleva 30 años con un modelo que no funciona.
Detalló en la entrevista que su propuesta a la presidencia es hacer un gran acuerdo nacional integrado por numerosos acuerdos parciales, en educación, salud, ambiente, impuestos, industria y agro.
En cuanto a la reactivación económica pospandemia aseguró que hay una manipulación inmensa del Gobierno cuando exagera un simple rebote de la economía.
Dijo que los principales economistas de Colombia están protestando pues el presidente Iván Duque presenta esto como si fuera una recuperación maravillosa.
Sin embargo, añadió, «cualquiera sabe que después de una crisis tan grave como la de 2020 viene un rebote, pero si sacamos el promedio de los últimos dos años es absolutamente mediocre».
Agregó que hay cifras desastrosas, las tasas de desempleo e informalidad siguen siendo altísimas, y la mitad de los colombianos están aguantando hambre.
Señaló como uno de los principales fracasos de la economía nacional es las escasas fuentes de empleo y riqueza que obligaron a cinco millones de colombianos a salir del país en busca de trabajo.
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