A las expresiones de dolor de la entidad, se unen instancias, críticos de arte, entre otros, quienes aseguran que su muerte enluta la cultura nacional.
El canal público Señal Colombia se unió a los mensajes de condolencias y aseguró que la filmografía de Durán dejó una huella en el cine colombiano con su mirada particular a los problemas sociales de esta sociedad.
Con documentales como Gamín (1978) o La guerra del centavo (1985), y con películas como Aquileo Venganza (1968), La nave de los sueños (1996) y La toma de la embajada (2000), Durán deja un legado enorme que, según el periodista Pedro Adrián Zuluaga, hay que redescubrir a partir de ahora sin prejuicios.
Por su obra, Durán fue ganador del premio Donostia a mejor director en el Festival de Cine de San Sebastián y fue el primer colombiano invitado al Festival de Cannes.
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