En su más reciente informe semanal sobre la pandemia, la organización dedicada a la promoción y difusión del conocimiento científico señaló que la incidencia de la enfermedad superó los 12 mil pacientes por 100 mil habitantes en 56 provincias del país.
Asimismo, creció 37,4 por ciento el índice de decesos y 68,7 por ciento el de casos activos, con incrementos de 32,2 y 20,5 por ciento en los niveles de ocupación de camas en salas de recuperación y terapia intensiva, respectivamente.
Mientras tanto, la tasa nacional de ocupación ascendió a 26,6 por ciento en las áreas médicas de recuperación y 18,2 en las de cuidados intensivos.
En ese sentido, el presidente de la Fundación Gimbe, Nino Cartabellotta, apuntó que “nos encontramos en una fase extremadamente crítica de la pandemia” en la cual “narraciones optimistas distorsionadas ocultan la insuficiencia de las medidas para ralentizar la curva de contagios”.
Entre otros aspectos, el profesor mencionó el creciente número de nuevos casos lo cual provoca la progresiva saturación de los hospitales con limitaciones para las intervenciones quirúrgicas programadas, incluso en pacientes oncológicos, y la reducción de capacidades asistenciales.
Según estadísticas publicadas la víspera por el Ministerio de Salud, las autoridades sanitarias italianas reportaron 313 fallecimientos y 196 mil 224 nuevos casos en las 24 horas precedentes, para un total de 139 mil 872 y siete millones 971 mil 68, respectivamente.
jf/fgg