La fuente atribuyó la dinámica de ese período al incremento de las cotizaciones de los productos energéticos, 29,1 por ciento; alimentos procesados, 1,4; sin procesar, 3,6; bienes duraderos, 0,8; y servicios relacionados con la recreación, incluido el cuidado personal, 2,3 por ciento.
La inflación subyacente, excluidos los alimentos sin procesar y la energía, fue de 1,5 por ciento y la general de 1,6, apuntó el Istat.
Por otra parte, en un contexto mensual, los precios al consumidor registraron un alza de 0,4 por ciento comparado con noviembre de 2021, en lo cual influyeron los alimentos sin procesar, 1,1 por ciento; bienes duraderos, 0,6; servicios vinculados al transporte, 1,9; y asociados a la recreación, 0,8.
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