Joseph que tras su despido de la Cancillería se declaró opositor, recordó que el premier sostuvo conversaciones con el abogado Joseph Felix Badio durante la jornada del magnicidio, y luego el letrado lo visitó a la residencia oficial, pese a estar sujeto a una orden de búsqueda. “El gobierno dirigido por el primer ministro Ariel Henry no podrá hacer justicia al difunto presidente Jovenel Moïse”, aseguró en un mensaje en Twitter el también exjefe de Gobierno, y alegó que el neurocirujano “sistemáticamente” obstruye la investigación.
El ex primer ministro sugirió que la revocación del titular de Justicia, Rockefeller Vincent y del comisionado de Gobierno, Bel-Ford Claude, tuvo como propósito evitar que Henry fuera inculpado por el crimen.
Vincent y Claude fueron despedidos de sus cargos cuando el último invitó al jefe de Gobierno a una audiencia para responder por las conversaciones sostenidas con Badio.
Joseph, igualmente señaó que Henry se opuso categóricamente a su petición de que la Naciones Unidas abriera una investigación internacional sobre el archivo, y calificó de ilusoria la existencia de una voluntad política para llevar a los responsables del asesinato ante la justicia.
Moïse, de 53 años, fue baleado en su residencia aparentemente por un comando de exmilitares colombianos, 18 de los cuales se encuentran detenidos en la Penitenciaría Nacional, aunque ninguno fue acusado formalmente.
Su asesinato profundizó el vacío institucional y la crisis política, con un Parlamento y poder Judicial disfuncionales, y un primer ministro con la legitimidad cuestionada, que propone elecciones este año.
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