Dorcély, rector de la Universidad de Puerto Príncipe, fue retenido junto a su chofer el pasado viernes en la comuna de Croix des Bouqutes, un suburbio situado a unos 10 kilómetros de la capital, y controlado por la pandilla 400 Mawozo.
La UEH condenó con “vehemencia este acto de barbarie cometido una vez más contra un miembro de la comunidad universitaria”, y alentó a las fuerzas públicas a conceder toda la importancia que requiere el caso para lograr la pronta excarcelación del profesor.
“Exministro, excomisionado jefe de la Comisión Administrativa, gran modernizador del servicio público haitiano y transformador del Inaghei, el profesor Dorcély es una figura destacada de nuestra sociedad», señaló.
Por su progresismo, su dinamismo y su combatividad, constituye un modelo para los jóvenes a cuyo servicio dedica buena parte de su carrera, como docente, como diseñador y primer decano de la nueva fórmula Inaghei así como fundador y rector de la Universidad de Port-au-Prince”, precisó el comunicado.
Días antes, la Conferencia de rectores, presidentes y líderes de las instituciones de educación superior de Haití pidió a todas las instituciones de altos estudios cerrar sus puertas en protesta contra el secuestro.
Su coordinador, Jean Robert Charles recordó que la universidad es la protectora de la nación, y su misión es formar una élite social, capaz de dirigir la nación, de ayudar al Estado ya cualquier gobierno.
El pasado fin de semana fue particularmente violento, con más de 30 de estos casos registrados por organizaciones de derechos humanos, mientras en zonas como Martissant, en la salida sur de la capital, individuos armados aterrorizaron a la población.
El domingo, la farmacéutica y presentadora de radio Caëlle Edmond Jean-Baptiste, fue secuestrada por segunda ocasión en menos de un año y medio, en la barriada de Bourdon en esta capital.
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