En conferencia de prensa conjunta luego de las negociaciones, Zelensky dijo que conversó con Sholz sobre la importancia de fortalecer el apoyo occidental a Kiev en los sectores de la seguridad, la economía y energético.
A la vez, enfatizó el interés de profundizar la cooperación con Berlín en todas las áreas.
El mandatario admitió que ambas partes mantienen enfoques diferentes con respecto al gasoducto Nord Stream 2, destinado a suministrar gas natural ruso al mercado germano y a los países vecinos a través del mar Báltico.
Zelensky propuso al jefe del Ejecutivo germano “empezar un diálogo estratégico en materia energética con el fin de desarrollar las garantías para Ucrania”.
Scholz viajó este lunes a Kiev y mañana lo hará a Moscú, donde se entrevistará con el presidente ruso, Vladimir Putin, en medio del aumento de las tensiones regionales.
En sus declaraciones a los periodistas, el canciller federal alemán opinó que el análisis sobre posible la adhesión de Ucrania a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) “no está en la agenda” por el momento.
No obstante, aseguró que Alemania está “en el lado de Ucrania”, país al que ya asistió con dos mil millones de euros y está dispuesto a seguir ayudando, apuntó.
Sobre el tema, Zelensky dijo que Kiev no abandonará el camino para lograr su membresía en la Alianza Atlántica, pero no sabe adónde conducirá ni cuándo concluirá.
El jefe de Estado contestó así al comentar la declaración del embajador de Ucrania en Reino Unido, Vadim Pristaiko, sobre la posibilidad de que su país cambie su posición respecto a adherirse a ese bloque militar.
“Tal vez, de hecho, el tema de las puertas abiertas para nosotros es una historia más bien parecida a un sueño, una señal de hacia dónde vamos, pero nadie sabe cuándo la alcanzaremos”, manifestó el presidente ucraniano acerca de la aspiración de su Gobierno de ser admitido en la OTAN.
Subrayó que “no hay ninguna señal nuestra de que la membresía en la OTAN no sea nuestro objetivo”, reafirmó.
Este lunes, el embajador ucraniano en Londres afirmó en entrevista para la cadena británica BBC que Kiev podría cambiar su posición sobre unirse a la alianza si este paso ayuda a “prevenir una guerra con Rusia”.
Sin embargo, más tarde aclaró sus palabras y explicó que cualquier concesión de Ucrania no se refiere a la negativa a ingresar en la OTAN. A pesar de esto, ya se ha hecho una demanda en el Parlamento ucraniano para retirar a Pristayko de la capital británica y liberarlo de su cargo.
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