Más de 1,4 millones de niños menores de cinco años sufren ahora ese riesgo y sin un aumento urgente de la ayuda, se espera que la situación humanitaria se deteriore aún más en los próximos meses, indicó esa entidad en un reporte difundido por el sitio oficial de noticias de la ONU.
Alrededor de 4,1 millones de somalíes necesitan actualmente asistencia humanitaria y es momento de actuar cuanto antes, recalcó Unicef.
De acuerdo con el jefe de Comunicaciones del Fondo en Somalia, Victor Chinyama, si la comunidad internacional espera a que se declare la hambruna, probablemente sea demasiado tarde, como ocurrió en 2011.
Gran parte de la mortalidad se produce antes de declararse la hambruna y ya cuando se empieza a registrar que la malnutrición aumenta y luego se agrava con un brote como el del sarampión o el cólera, la mortalidad se dispara muy rápidamente, apuntó.
Según informó este martes el representante especial del secretario general de la ONU para Somalia, James Swan, las condiciones de seguridad, políticas y humanitarias en ese territorio también continúan muy frágiles.
El alto representante dijo en el Consejo de Seguridad de la ONU que las elecciones ese país africano ahora tienen más de un año de retraso con respecto al calendario prescrito por la Constitución.
Al respecto, hizo un llamado a los órganos de gestión electoral, así como a los líderes políticos, para que aceleren y concluyan rápidamente el proceso de los comicios.
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