La criticada medida da potestad aquí a las autoridades migratorias para enviar a los no mexicanos al vecino país y que esperen por sus audiencias de asilo en los tribunales estadounidenses.
Según reportes medios locales, el Supremo –integrado por nueve magistrados, seis de ellos conservadores- fijó el caso para su discusión en abril.
El actual gobierno pidió la revisión del fallo judicial emitido en diciembre por una corte de apelaciones que ordenó mantener los Protocolos de Protección al Migrante (conocidos como «Quédate en México») adoptados por Trump en 2019.
Bajo la presidencia del republicano, unas 70 mil personas fueron retornadas a México para esperar en ese territorio el resultado del proceso de solicitud de asilo, de acuerdo con expertos.
Aunque Biden suspendió el programa cuando llegó a la Casa Blanca, un juez del sureño estado de Texas dictaminó que se restableciera «de buena fe» y se reactivó el pasado 6 de diciembre.
Según la mansión ejecutiva el “Quédate en México” es «ineficaz e inhumano».
Más de dos millones 407 mil 500 migrantes fueron interceptados en la frontera sur desde que Biden asumió el cargo el 20 de enero de 2021.
No obstante, en octubre, el demócrata anunció la reanudación de las deportaciones expeditas de “ciertos grupos familiares” que cruzan ilegalmente la frontera.
La decisión se amparó en el denominado Título 42, una norma que autoriza la expulsión de migrantes por razones de salud teniendo en cuenta el contexto sanitario que generó la pandemia de Covid-19
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