Ubicada en el extremo suroriental del país, la provincia es la más atrasada en la ejecución de las obras previstas en el plan integrado de intervención en los municipios (PIIM), una de las principales iniciativas del Estado para enfrentar las históricas asimetrías territoriales en esta nación africana.
Evidencias de la situación reinante fueron expuestas por el gobernador José Martins, en un análisis que encabezó el presidente de la República, João Lourenço, con transmisiones en vivo por la televisión pública, desde la ciudad cabecera de Menongue.
Martins agradeció la posibilidad de intercambiar directamente con el mandatario y los ministros, quienes pudieron observar, además, un video sobre importantes obras inclusas en la provincia.
El funcionario señaló los problemas en aspectos como la construcción de viviendas, carreteras, redes de acueducto, infraestructura eléctrica y de telecomunicaciones; así como la ausencia de bancos y estaciones de combustible en varios municipios.
Asimismo, lamentó la existencia inversiones dejadas a medias para dotar a la provincia de un estadio de fútbol, un polo universitario en Cuito Cuanavale y nuevas instalaciones de salud a fin de responder a la demanda de servicios asistenciales.
Con el término de “elefantes blancos”, acuñó la permanencia de construcciones incompletas durante años, sin valor de uso y sensibles pérdidas económicas de continuar abandonadas.
Sin embargo, a escala nacional más del 60 por ciento de los mil 932 proyectos elegibles para la implementación del PIIM están en ejecución, de los cuales mil 686 forman parte del Programa de Inversión Pública y 246 corresponden a gastos de apoyo al desarrollo, indicó el Ejecutivo.
En el ámbito de la acción social, las autoridades distinguieron que el Programa Integrado de Desarrollo Local y Lucha contra la Pobreza logró concluir más de tres mil actuaciones de las cinco mil 837 aprobadas para el ejercicio fiscal de 2021, mientras otras mil 764 continúan en proceso.
Además, durante el período en análisis 64 mil 903 personas fueron integradas a diversas actividades generadoras de ingresos, indicó un resumen de las deliberaciones acontecidas ayer en el foro nacional con sede en Menongue, según reseñó el Jornal de Angola.
De acuerdo con la fuente, el programa Kwenda, de fortalecimiento de la protección social en el país, ya benefició a más de 399 mil hogares de bajos ingresos.
El consejo de gobernación local distinguió avances en el otorgamiento de microcréditos a emprendedores y en el registro de trabajadores por cuenta propia, quienes al salir de la informalidad podrán tener acceso a financiamiento y capacitación, entre otras ventajas.
mem/mjm
