Ambas circunstancias podrían reducir el crecimiento previsto del producto interior bruto (PIB) para el actual ejercicio (3,9%) entre 0,5 y 1,1 puntos porcentuales, en función del nivel que alcance el precio del barril de petróleo, evaluando en la peor de las hipótesis que este se situara en torno a 119 dólares.
A su vez la inflación también se verá afectada y debería alcanzar el 3,7 por ciento este año, según las previsiones más favorables, o el 4,4 por ciento en el escenario más negativo.
Según explicó el gobernador de la institución monetaria, Francois Villeroy de Galhau, el choque la crisis en Ucrania será menos grave para el crecimiento económico que la pandemia de Covid-19, y sea cual sea el escenario “hasta 2024 el crecimiento seguirá siendo positivo, sin recesión”, aseguró.
Al mismo tiempo el ministro de Economía francés, Bruno Le Maire, declaró hoy en la cadena LCI que el crecimiento francés “resiste” ya que cuenta con fundamentos “sólidos”, aunque “obviamente, se verá afectado por la crisis de Ucrania”, reconoció, añadiendo que la evaluación se hará “tan pronto como tengamos una visión más clara de lo que puede ocurrir en los mercados energéticos”.
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