Kenia López Rabadán, del PAN, adelantó que ya hay pláticas entre los senadores de los cuatro partidos en contra de este decreto, aprobado por la mayoría de los partidos Morena, del Trabajo y Verde en la Cámara de Diputados, el cual levanta la veda decretada por el también opositor Instituto Nacional Electoral (INE). Anticipó que si Morena aplica su mayoría absoluta para imponerlo en el Senado se recurrirá a la Suprema Corte de Justicia de la Nación por la considera flagrante violación a la Constitución.
Legisladores de la coalición de Gobierno replicaron que la posición de esos cuatro partidos refleja la aceptación de una derrota adelantada de sus esfuerzos para parar o desvirtuar la consulta porque saben que el 10 de abril, fecha del plebiscito, el pueblo ratificará a su presidente Andrés Manuel López Obrador.
Recordaron que el INE ha hecho todo lo indecible para abortar la consulta y no lo ha logrado y, en represalia, con falsos argumentos sobre escasez de recursos financieros trata de mediatizar el proceso para intentar restarle validez o dejar en dudas su legalidad.
Esa es la verdadera razón, añadieron, de habilitar la menor cantidad de casillas de votación posible para minimizar la cantidad de sufragantes y tomar ese hecho como argumento para cuestionar los resultados, que saben serán favorables a López Obrador.
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