En una declaración a la prensa acreditada ante Naciones Unidas, el titular felicitó al Gobierno de Saná, a la Coalición liderada por Arabia Saudita y los hutíes por pactar una tregua de dos meses en ese territorio, incluidos los ataques transfronterizos.
Asimismo, instó a realizar los arreglos necesarios para apoyar la implementación exitosa de la tregua y poner en funcionamiento los mecanismos de cooperación, sin demora.
Las partes aceptaron detener todas las operaciones militares ofensivas aéreas, terrestres y marítimas dentro de Yemen y más allá de sus fronteras, subrayó Guterres.
También se pusieron de acuerdo para que los barcos de combustible ingresen a los puertos de Hodeida y que los vuelos comerciales operen dentro y fuera del aeropuerto de Saná a destinos predeterminados en la región, detalló.
Del mismo modo, pactaron reunirse bajo los auspicios del enviado especial de la ONU para Yemen, Hans Grundberg, con el fin de abrir carreteras en Taiz y otras provincias, agregó el diplomático portugués.
Esta tregua, que coinciden con el inicio del mes sagrado del Ramadán, puede renovarse más allá del período de dos meses con el consentimiento de las partes, y abre las puertas para abordar las necesidades humanitarias y económicas urgentes de Yemen, apuntó.
De acuerdo con Guterres, esta aparece como una oportunidad genuina para reiniciar el proceso político de Yemen encaminado a poner fin a la devastadora guerra en ese territorio.
El cese de los combates, junto con la entrada de barcos de combustible y la flexibilización de las restricciones a la circulación de personas y mercancías dentro y fuera del país, contribuirá a generar confianza y crear un entorno propicio para reanudar las negociaciones, subrayó.
Guterres reafirmó también la importancia del apoyo regional e internacional de cara a la implementación exitosa de la tregua.
Durante más de siete años, expresó, la guerra ha devastado las vidas de millones de mujeres, niños y hombres, un sufrimiento que tiene lugar lejos de los focos de los medios.
El conflicto en Yemen alimenta una de las peores crisis humanitarias del mundo, lamentó el titular, y amenaza la paz y la seguridad regionales.
Yemen padece esta compleja situación, en gran medida, debido al conflicto que enfrenta a tropas gubernamentales con rebeldes hutíes.
La crisis escaló en 2015 con el comienzo de bombardeos de una coalición antiinsurgente liderada por Arabia Saudita.
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