Así lo reiteró Rubén Moreira, coordinador de esa bancada en la Cámara Baja, lo cual llama la atención pues fue ese partido, en 1960 bajo la presidencia de Adolfo López Mateo, el que nacionalizó esa industria, ahora prácticamente en manos privadas, fundamentalmente de capital español y estadounidense.
El líder parlamentario priísta sostuvo que nada impedirá que los legisladores de su bancada estén en la sesión mañana domingo para discutir la reforma eléctrica, e indicó que sus compañeros tomarán todas las medidas para estar presentes en el hemiciclo.
Esta última advertencia se debe a que las dos terceras partes de los votos que se requieren para que la ley prospere es de los presentes en la sesión, y no de la totalidad de las curules.
La coalición oficialista, integrada por los partidos Morena, del Trabajo y Verde, no alcanzan la cifra exigida de votos positivos y buscan atraer hacia sus posiciones a opositores de la alianza de los partidos PRI, Acción Nacional, Revolucionario Democrático y Movimiento Ciudadano.
Hasta el presente, según las encuestas y conteos de esas cuatro organizaciones, no hay posibilidad de que el Gobierno logre la cantidad de sufragios requeridos.
De ocurrir esa “traición a la patria”, como define el presidente Andrés Manuel López Obrador votar a favor de las transnacionales Iberdrola y otras españolas y estadounidenses, anunció tener un plan B, que no ha detallado, que requiere mayoría simple.
Solo develó que de ser adversa la votación de mañana, el lunes estará presentando una iniciativa de reforma de la Ley de Minas, que firmó ya ayer, para preservar el litio de las garras de las empresas extranjeras y nacionales privadas, y garantizar que ese mineral estratégico sea de los mexicanos.
La oposición acusa al Gobierno de buscar la forma de bloquear su entrada al hemiciclo para que no tenga quorum suficiente, pero Morena lo ha desmentido y calificado de teatro pueril y mediático sus anuncios de que dormirán esta noche en sus oficinas del local, para lo cual compraron cientos de ropa de cama, incluidos piyamas para hombres y mujeres, y almohadas.
Moreira agregó que el exgobernador de Campeche Carlos Miguel Aysa González podría ser expulsado del PRI si es nombrado embajador de México en República Dominicana, como fue propuesto por López Obrador.
Y también su hijo, diputado, que ya anunció su rebelión al alto mando priísta y declaró que votará a favor de la reforma presentada por el gobierno, hasta ahora el único que lo ha declarado públicamente, aunque hay rumores que otros 14 también lo harán a favor de la iniciativa.
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