Según el ministro de Salud Pública, Julio Borba, el país se encuentra en una situación epidemiológica favorable, de acuerdo con las últimas 11 semanas monitoreadas, con pocos casos positivos, hospitalizados y defunciones, y se mantiene una tendencia al descenso de contagios y a una estabilidad a nivel nacional.
Por ello este lunes el presidente paraguayo, Mario Abdo Benítez, firmó un decreto que deroga la declaración de estado de emergencia sanitaria contemplada en el Decreto 3456, que estaba vigente desde hace dos años.
El alcance de esta normativa deja sin efecto la Ley de uso obligatorio de tapabocas, que a partir de esta fecha pasa a ser apenas una recomendación.
En este contexto el Ministerio de Salud Pública mantiene la recomendación del uso de tapabocas de manera preventiva y en situaciones específicas, como la sospecha de casos positivos del SARS-CoV-2 o la permanencia en lugares cerrados.
Asimismo, el empleo de mascarillas será imprescindible en las instalaciones públicas y privadas que prestan servicios médicos, y en las residencias y hogares de ancianos.
Igualmente se recomienda en el transporte público, en lugares sin adecuada ventilación, y en escuelas y centros comerciales.
Borba invitó a la población “a no abandonar el tapabocas, pues es un aliado en cuanto a la disminución de los cuadros virales”.
El ministro instó a completar la vacunación con el objetivo de disminuir el impacto de la enfermedad, la cual se encuentra en un nivel de transmisión baja en el territorio paraguayo, apuntó.
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