Pese a esa elevada cifra de fallecidos en hechos violentos, el jefe de Operaciones de la CRC, Jim Batres, afirmó que su entidad estaba preparada para datos peores, toda vez que este año fueron eliminadas la mayoría de las restricciones sanitarias por la pandemia de Covid-19, establecidas desde marzo de 2020.
Pensábamos que al no tener restricciones íbamos a tener más accidentes, tanto en playas como en carreteras, producto de la salida masiva de vacacionistas, reiteró Batres, quien apuntó además el hecho de que la semana finalizó sin búsquedas activas en montaña o agua de personas desaparecidas.
El jefe de Operaciones de la CRC atribuyó esos resultados al trabajo de su institución y a que hubo un poco más de conciencia por parte de las personas que salieron a disfrutar de estos días de descanso por la Semana Mayor.
Además de las 16 víctimas fatales en los lugares de los accidentes de tránsito, la CRC reportó siete asesinados, igual cantidad de perecidos en sucesos acuáticos, dos por caídas, uno electrocutado y siete en hechos por investigar.
La CRC indicó también que en los puestos instalados en todo el país, sus funcionarios atendieron 12 mil incidentes, un 18 por ciento más que en 2021, año en que contabilizaron 31 muertes violentas en Semana Santa, pese a la vigencia de las restricciones sanitarias por la Covid-19.
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