De acuerdo con diarios nacionales, el debate sobre esa propuesta ha ido a cuentagotas en la política demócrata desde que se apoderaron de él como tema principal en la campaña presidencial del 2020.
Pero ahora que es un asunto de primera línea para la Casa Blanca, de acuerdo con el New York Times, el presidente ha bromeado con una decisión en las próximas semanas.
Grupos clave del partido que se identifica con el color azul (D) se están movilizando en favor de la decisión, como la Federación Estadounidense del Trabajo y Congreso de Organizaciones Industriales (AFL-CIO, en inglés).
Después de todo lo que hemos soportado tras la pandemia de la Covid-19, no podemos pedir a los trabajadores que hagan más sacrificios, dijo la presidenta de la Federación, Liz Shuler, en un comunicado.
Es el momento de cancelarla, no de cobrarla, agregó.
Por otro lado, los demócratas del Senado están presionando al ocupante de la Casa Blanca para que, de decidir no condonarla, al menos restar una suma importante de la deuda.
No obstante, otras entidades y personalidades de la política se oponen a esa iniciativa.
La última salva fue lanzada el fin de semana por el consejo editorial del Times, que se pronunció estridentemente en contra de la condonación generalizada de los préstamos.
«Sentaría un mal precedente y no haría nada para cambiar el hecho de que los futuros estudiantes se graduarán con más deudas, junto con la esperanza ciega de otra amnistía futura», escribió el diario.
El medio también calificó la idea de «legalmente dudosa, económicamente insegura, políticamente cargada y educativamente problemática».
La columna se suma a otras voces destacadas de la izquierda, como Paul Begala y Bill Maher, que en las últimas semanas se han opuesto a la idea.
Algunos economistas demócratas, como Larry Summers, son desde hace tiempo escépticos de esa propuesta, así como la inmensa mayoría de los republicanos, de acuerdo con la publicación Político.
El viernes, un grupo de republicanos de la Cámara de Representantes reiteró a la Casa Blanca que creen que Biden carece de poder legal para cancelar grandes cantidades de deuda estudiantil.
Biden recientemente extendió la pausa de los pagos para los préstamos estudiantiles federales hasta el 31 de agosto, en relación con la pandemia.
Según la cadena de noticias CNN, más de 3,6 millones de prestatarios estarán tres años más cerca de recibir la condonación a través de lo que se conoce como el programa de pago basado en los ingresos o IDR, por sus siglas en inglés.
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