El homenaje lo organizó el gobierno de México para celebrar tenerla activa y creativa en tan luminosa edad y para hacerlo más afectivo abrió al público la exposición Elena y sus causas.
Mientras, en el salón de honor la Orquesta del Teatro de Bellas Artes, los Semilleros creativos de Ecatepec, Monclova y Tenancingo, y la Orquesta Escuela Carlos Chávez, le regalaron su música.
La secretaria de Cultura, Alejandra Frausto Guerrero, la llamó con toda justicia Elenísima y la gente aplaudió con emoción y gusto tan merecido título de amor ganado y respeto bien por encima de lo nobiliario que pudiera parecer.
Claudia Sheinbaum, la jefa del gobierno de la Ciudad, la denominó símbolo que tomó partido por los estudiantes reprimidos por un régimen represivo en 1968 y 1971 y que además dio voz a las mujeres y movimientos que han forjado la historia de México.
El presidente del Sistema Público de Radiodifusión del Estado, Jenaro Villamil Rodríguez, la calificó de la antorcha que nos alumbra y deslumbra con la lucidez de su sencillez y la congruencia y valentía que no se disfraza.
Elena, la gran cronista de los sucesos más relevantes de México, expresó su sentir ante el abrumador regalo de cumpleaños con una de las palabras más sublimes y abarcadora de la lengua: “Gracias”.
Esa, explicó enseguida, “es una palabra muy bella y se las digo desde el fondo del corazón».
En la exposición titulada Elena y sus causas, se exhiben 22 obras realizadas por el Semillero creativo de Pintura en Lázaro Cárdenas, Quintana Roo, y aborda dos facetas de la vida y obra de la escritora: Elena soñadora y Elena luchadora.
Entre sus obras literarias destacan La noche de Tlatelolco, Fuerte es el silencio, El tren pasa primero y El recado, Luz y luna, las lunitas (1994); La piel del cielo (Premio Alfaguara de Novela 2001); El tren pasa primero (2006. Premio Rómulo Gallegos 2007), Amanecer en el Zócalo.
Se añaden otras como Querido Diego, te abraza Quiela, novela epistolar (1985), Los 50 días que confrontaron a México (2007), Octavio Paz, las palabras del árbol (2015), Encierro que arde: Álvaro Mutis desde Lecumberri (2018) y las biografías Tinísima (por Tina Modotti), y Leonora (2011), sobre la pintora Leonora Carrington, por mencionar algunas.
«La Princesa Roja» -por el título nobiliario real heredado en Polonia, aunque su país natal es Francia, y por sus ideas políticas de izquierda- ha recibido reconocimientos nacionales e internacionales, y es una de las escritoras más entrañables de este país donde llegó a los 10 años para quedarse por siempre.
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