Esta entidad asegura que nueve de cada 10 personas en México la perciben como frecuente o muy frecuente, mientras que sus estudios calculan que el soborno y otras manifestaciones de la corrupción en esferas públicas le sacaron del bolsillo al ciudadano común más de 500 millones de dólares en 2021.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental de ese año dirigida por el Inegi y publicada en su sitio web, los mayores gastos por corrupción fueron por sobornos de las autoridades de seguridad pública, quienes obligaron a los ciudadanos a pagar tres mil 186.4 millones de pesos (160 millones de dólares), para evitar ser sancionados por los cuerpos de policía.
Un 86,3 por ciento de la población consideró frecuentes los actos de corrupción en las instituciones de gobierno, mientras que el 14,7 por ciento restante de la población que realizó trámites, pagos, solicitudes de servicios, o bien tuvo contacto con algún servidor público, experimentó actos de corrupción.
Por su parte, el nivel de insatisfacción que tienen los ciudadanos del país con la prestación de trámites y servicios, supera el 52 por ciento en las personas que no están satisfechas con los tratos que se proporcionan todos los días.
Inegi difundió la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental 2021 como una muestra de la situación imperante a pesar de la gran batalla del gobierno contra la corrupción, el principal frente nacional del presidente Andrés Manuel López Obrador. mem/lma