Después de muchos meses de preparación y de postergación, por causas por la pandemia de la Covid-19 y otras prioridades urgentes, sesionará durante tres días en esta capital.
Castillo reseñó que hombres y mujeres del partido estuvieron junto al resto de sectores políticos y sociales del país comprometidos en la recolección de firmas para el referendo derogatorio de la Ley de Urgente Consideración (LUC).
Sostuvo que esa batalla fue respuesta a una de las críticas y autocríticas realizadas en el congreso del Frente Amplio, del que PCU forma parte, y una de las explicaciones del porqué de la derrota electoral de 2019 que impidió un cuarto gobierno de izquierda.
“Nuestro pueblo generó el escenario para debatir los problemas profundos de nuestro país, exponer el plan de la derecha en el gobierno de recorte de derechos, debilitar la democracia en nuestro país que es lo que estuvo en juego de cara al 27 de marzo en referendo”, recalcó.
Reiteró que el Frente Amplio es una opción de izquierda realmente alternativa para dar respuesta a los desafíos que tiene la población y “debe volver a ser gobierno, pero no hacer lo que ya hizo, generando condiciones para que se puedan ganar las elecciones de 2024”.
Pero reafirmó que el Partido Comunista tiene una definición en defensa de los intereses de la clase obrera y trabajadora en la construcción de una alternativa al capitalismo, “no hay medias tintas, no se puede administrar el capitalismo ni tiene ninguna dosis de humanismo posible”.
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