Según declaraciones del primer ministro búlgaro, Kiril Petkov, en la cumbre que se desarrolla en Bruselas se acordó que su país podrá seguir importando crudo ruso hasta finales del año 2024 a través del puerto de Burgas, en el mar Negro.
La excepción resulta inevitable pues el consumo de petróleo en Bulgaria depende por completo de las importaciones de Rusia. Además, la única refinería del país balcánico funciona exclusivamente con crudo ruso.
“Bulgaria tendrá un párrafo separado en el acuerdo final, con una excepción para nosotros hasta finales de 2024. Se nos da la posibilidad de ajustar nuestra única refinería para que pueda funcionar con un crudo diferente al ruso”, declaró Petkov.
El problema del funcionamiento es tanto tecnológico como ecológico ya que la refinería tendrá que ajustar sus instalaciones si pasa a funcionar con otros crudos y este proceso durará entre seis y doce meses, agregó.
Los líderes de la Unión Europea (UE) alcanzaron en la noche de este lunes un acuerdo sobre el embargo a «más de dos tercios» de sus compras de petróleo ruso, según anunció el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, en un mensaje en Twitter.
mv/att