Este partido, en el estadio Rommel Fernández, abre un nuevo proceso de cara al Mundial 2026 en choques eliminatorios de la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol(Concacaf).
Sobre el tope, el seleccionador de la roja centroamericana, el hispano-danés Thomas Christiansen, afirmó que la idea es pensar a largo plazo, donde el objetivo es estar en todas las competiciones.
El técnico señaló que el istmo cuenta con todas sus armas para este duelo frente a los ticos, el cual como se ha dicho con anterioridad tendrá un cierto matiz a revancha y que saldrán con el objetivo de obtener los tres puntos.
Hacia Qatar 2022, Costa Rica arrebató a Panamá la posibilidad de ir a repechaje en su grupo eliminatorio, al superarle en enero pasado 1-0.
Al respecto, Christiansen señaló que “será un partido complicado, aunque sabemos que un partido de clasificación a un Mundial y uno de Liga de Naciones no tienen el mismo peso, pero igual hay que ir con agresividad a ganar”.
Por Costa Rica, entrenado por el colombiano Luis Fernando Suárez, no estarán Bryan Ruiz, por dar positivo por Covid-19, y el arquero Keylor Navas que se alista para el encuentro de repechaje frente a Nueva Zelanda, el 14 de junio próximo.
Ante la ausencia de Navas, el entrenador puntualizó que sin él Costa Rica no estuviera tan cerca del Mundial, pero agregó que esté o no esté, hay que salir a ganar el partido.
Por su parte, Suárez reconoció la importancia de los dos duelos de la Liga de Naciones de la Concacaf, ante Panamá y Martinica, pero dijo que los jugadores están pensando más en el partido ante Nueva Zelanda.
También alabó el trabajo de la selección panameña y señaló que es un grandísimo equipo y que esperan hacer un gran duelo de visita en el Rommel Fernández.
mem/ga