La Asociación Profesional de Magistrados, la Asociación Nacional de Magistrados Haitianos y la Asociación de Jueces de Paz de Haití, escribieron al primer ministro Ariel Henry y advirtieron que esa propuesta podría estar al margen de la ley, pues los letrados necesitan una vasta experiencia en el sector.
“En ninguna parte de la ley de 27 de noviembre de 2007 sobre el estatuto de la judicatura se prevé que un abogado pueda ser nombrado juez de la Corte de Casación, el máximo tribunal judicial del país”, se lee en el documento.
Añaden que esa integración directa sería un grave atentado a la carrera de los magistrados y generará vehementes disputas, además de una crisis sin precedentes dentro de todo el poder judicial.
Asimismo, recomendaron nombrar candidatos a los magistrados en ejercicio, fiscales de las cortes de apelación o cercanos al Tribunal de Casación, así como jueces de primer grado cuyo mandato expiró y son menores de 65 años.
La designación de propuestas para integrar la corte suprema, disfuncional desde hace más de un año, generó polémica en el país, y varias voces señalaron que incumple las leyes fundamentales.
El profesor universitario Ted Syndic, recordó que no existe ninguna disposición legal o constitucional que sustente las acciones del Ministerio de Justicia, y calificó de irresponsable nombrar durante una administración provisional a jueces del Tribunal de Casación, que luego permanecerán en el cargo durante 10 años.
De conformidad con el artículo 175 de la Constitución y el 28 de la Ley sobre el Estatuto del Poder Judicial, solo el jefe de Estado puede designar a los jueces del Tribunal de Casación a partir de una lista de magistrados presentada por el Senado.
Sin embargo, el asesinato en julio del mandatario Jovenel Moïse y la desarticulación del Parlamento en enero de 2020, hace más compleja llenar las vacantes de la Corte que además perdió a su presidente en junio como consecuencia de la Covid-19.
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