Todos debemos avergonzarnos porque nuestra herencia cristiana debería inspirarnos a tratar a todos los solicitantes de asilo con compasión, honestidad y justicia, como hemos hecho durante siglos, afirmó Welby en una carta publicada este martes en el diario The Times, junto a otros 23 obispos.
De acuerdo con los líderes religiosos británicos, el tráfico de personas debe ser combatido con la creación de rutas seguras para los refugiados que tratan de llegar al Reino Unido.
Las deportaciones y la potencial devolución forzada de los solicitantes de asilo a sus países de origen no son la respuesta, recalcaron.
El primer vuelo con al menos siete migrantes saldrá de Londres en las próximas horas de este martes, después que un tribunal londinense rechazó la víspera un recurso de apelación presentado por un sindicato y varias organizaciones defensoras de los derechos humanos.
El esquema diseñado por las autoridades británicas trata de desalentar el flujo de personas que cruzan el canal de La Mancha en botes de goma y otras embarcaciones endebles, los deportados deberán permanecer en el país africano mientras se tramitan sus solicitudes de asilo.
Como parte del acuerdo, el Reino Unido se comprometió a pagar a Ruanda alrededor de 158 millones de dólares.
Los grupos humanitarios, las organizaciones caritativas y el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados cuestionan, sin embargo, la legalidad de una política que califican de inhumana y peligrosa.
El opositor Partido Laborista también criticó el plan del gobierno conservador, y lo calificó de inviable, falto de ética y ajeno a los valores británicos.
En declaraciones a la cadena Sky News, la diputada laborista Lucy Powell llamó la atención sobre el alto costo que implicaría el traslado de los solicitantes de asilo a Ruanda, el cual se estima en más de medio millón de dólares por persona.
La canciller Liz Truss desestimó, sin embargo, las críticas de los líderes religiosos y de la oposición al plan, y aseguró que es totalmente legal y efectivo para desalentar el tráfico de migrantes a través del canal de La Mancha.
Según datos extraoficiales, más de 28 mil personas usaron esa vía el año pasado para llegar al Reino Unido, mientras que en lo que va de 2022, la cifra supera los 10 mil.
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