En su Barómetro, publicado este jueves, esa entidad mostró que en los últimos tres meses esa actividad estuvo por encima de la compra-venta de bienes, lo que indica un cambio en los patrones de consumo.
De acuerdo con ese medidor de la OMC entre los índices de más fuerte crecimiento están el transporte aéreo de pasajeros, las tecnologías de la información y las comunicaciones, los servicios financieros, el trasiego de contenedores y la construcción.
El comercio mundial de servicio ha mostrado un incremento lento pero constante desde que tocó fondo en el segundo trimestre de 2020 en las primeras etapas de la pandemia de la Covid-19, en tanto avanzó hacia la recuperación a finales de 2021 con un alza del 15,6 por ciento, aunque se mantuvo un 8,9 por ciento por debajo de su pico previo a la crisis sanitaria.
Por el contrario la comercialización global de bienes, después de crecer a doble dígito en 2021, está frenada por el efecto de la guerra en Ucrania y por la nueva ola de Covid-19 que golpea a China, y que provocan disrupciones en el transporte y las cadenas de suministros, lo que servirá a su vez para avivar más la inflación.
La OMC recortó en abril del 4,7 al tres por ciento su previsión de crecimiento del comercio para este año, y advirtió que si se recrudece la situación, este repunte podría quedarse en un leve incremento del 0,5 por ciento.
car/crc