La decisión se adoptó la víspera en el Consejo de Ministros, y el aniversario se agregó a la lista de fechas históricas, aseguró la plataforma digital Haiti24.
Moïse que tuvo un mandato controvertido, fue alcanzado por 12 disparos aparentemente a manos de un comando armado integrado por exmilitares colombianos, pero casi un año después del magnicidio aún ningún sospechoso fue imputado oficialmente en Haití.
El caso ya pasó por cuatro jueces de instrucción que renunciaron alegando problemas personales, mientras un magistrado, Garry Orélien, fue despedido por incumplir los plazos.
Por su parte, las autoridades de Estados Unidos acusaron formalmente a dos presuntos involucrados en el asesinato, y está fijada para julio una audiencia donde imputarían a un tercero.
La parálisis de la investigación en Haití generó criticas contra el primer ministro Ariel Henry, quien en septiembre pasado fue llamado a declarar por el entonces comisario de Gobierno, Bed Ford Claude.
La semana pasada el excanciller y ex primer ministro Claude Joseph responsabilizó a Henry por el estancamiento de la pesquisa y reiteró su petición de una comisión internacional para investigar el crimen.
Moïse es el quinto presidente asesinado en Haití mientras ejercía el cargo, y su muerte profundizó la crisis sociopolítica de la nación mientras las fuerzas son incapaces de llegar a un acuerdo.
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