El 24 de este mes, el alto tribunal de esa nación derogó la sentencia conocida como Roe contra Wade, que desde 1973 garantizaba el acceso a la interrupción del embarazo.
Nos manifestamos en repudio a ese acto y en solidaridad con nuestras compañeras en Estados Unidos. Se trata de un retroceso importante que elimina un derecho conquistado hace casi 50 años, declaró a Prensa Latina, Viviana Norman, participante en la protesta.
Resistiremos cualquier avance conservador sobre nuestras luchas y nuestros cuerpos. No podemos permitir que algo que ya está ganado se prohíba, añadió.
Las representantes de organizaciones sociales y feministas partieron desde el capitalino centro La Rural y marcharon hasta la sede de la misión diplomática, frente a la cual demandaron el respeto a las mujeres y a los logros alcanzados en cuanto a igualdad de género.
Asimismo, aseguraron que la lucha feminista se expande por América Latina.
Recientemente, la ministra argentina de Salud, Carla Vizzotti, resaltó la importancia de conquistar y defender los derechos humanos todos los días.
En tanto, la titular de Mujeres, Géneros y Diversidad Elizabeth Gómez calificó lo ocurrido en Estados Unidos como un retroceso histórico.
El dictamen de la corte norteamericana, que deja a los estados la potestad para decidir si prohibir o no ese procedimiento, fue aprobado por el voto de seis jueces conservadores contra tres liberales y recibió críticas de organizaciones dentro y fuera de ese país.
car/gas