Intensas lluvias provocaron una fuerte descarga de agua en un canal adyacente a la gruta ocasionando el desastre en la caverna, que está a tres mil 888 metros de altura sobre el nivel del mar.
Entretanto, se llevan a cabo operaciones de búsqueda y rescate para encontrar a los desaparecidos y más de 15 mil peregrinos fueron puestos a salvo.
No hay desprendimientos de tierra, pero sigue lloviendo, aunque no hay problemas en las labores de rescate, señaló el periódico Daily News and Analysis.
Cuatro equipos de la Fuerza Nacional de Respuesta a los Desastres (NDRF) con más de 100 rescatistas participan en las labores de salvamento junto al ejército indio y otras entidades, dijo el director general de la NDRF, Atul Karwal.
Más de 100 mil personas ofrecieron sus oraciones en el santuario de la cueva y estaba previsto que el yatra (peregrinación) finalice el 11 de agosto con motivo del Raksha Bandhan, un festival hindú y también secular que celebra el amor y el deber entre hermanos y hermanas.
Las autoridades dijeron que el Amarnath Yatra, que comenzó el 30 de junio, fue suspendido por la tragedia y se tomará una decisión sobre su reanudación una vez que las operaciones de rescate terminen.
El Departamento de Meteorología de la India dijo que el suceso de la cueva de Amarnath se debió a un evento de precipitaciones muy localizado, que se produjo en horas de la tarde y descargó una copiosa lluvia y gruesas corrientes de lodo rodaron por las laderas de la montaña hasta el valle.
La riada arrastró decenas de personas y anegó tiendas y cocinas comunitarias con barro y rocas que se precipitaron ladera abajo.
Las aguas golpearon el campamento base fuera del santuario, dañando 25 tiendas y tres cocinas comunitarias que sirven comida a los peregrinos, según las autoridades.
Se instalaron hospitales temporales para asistir a los heridos y se puso en marcha un centro de mando integrado, además de establecerse números telefónicos para ayudar a las familias de los afectados.
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