La intérprete de Envolver, melodía con más de 140 millones de reproducciones en la plataforma de videos YouTube, repudió en la red social Twitter el ataque perpetrado por un partidario del mandatario Jair Bolsonaro contra un tesorero del Partido de los Trabajadores (PT), muerto a tiros en la ciudad de Foz do Iguaçu, en el sureño estado de Paraná.
El homicidio ocurrió en la madrugada del domingo, cuando el policía penal federal Jorge Guaranho interrumpió a balazos la fiesta del cumpleaños 50 de Marcelo Arruda (armado también como guardia municipal) en la sede de la Asociación Deportiva Salud Física Itaipú.
Guaranho fue herido en el intercambio de disparos y permanece internado en un hospital de la localidad.
Imágenes de una cámara de seguridad registraron el momento en que ambos discuten fuera de la fiesta, antes que el bolsonarista (seguidor de Bolsonaro) eliminara al tesorero del PT.
«Si no hubiera una muerte envuelta en este caso del partidario de Lula, que fue atacado por un bolsonarista, yo diría que la estupidez de esas personas llega a ser divertida. Pero no. Es aterrador» escribió Anitta.
Precisó que nunca fue petista, «pero este año estoy con Lula y quien quiera mi ayuda para hacerlo bombear aquí en Internet, Tik tok, Twitter, Instagram. Es solo pedirme y haré lo que está a mi alcance, de no ir contra ley electoral, yo lo haré», remarcó.
«A partir de este momento yo soy Lulalá primera guardia. Y lucharé por una novedad en la política presidencial brasileña en las próximas elecciones», remarcó.
En la jornada, los partidos que componen el movimiento Vamos Juntos Por Brasil refutaron la violencia por parte de seguidores de Bolsonaro, a raíz del asesinato de Arruda.
Tal unión está integrada por los partidos de PT, Socialista Brasileño, Comunista de Brasil, Verde, Socialismo y Libertad, Rede de Sustentabilidad y Solidaridad.
Indica que la violencia está estimulada «por las actitudes y el discurso de odio del actual presidente de la República contra todos los que de él divergen o le hacen oposición».
Según el movimiento partidista, el hecho de sangre «es un crimen político, contra la libertad de opinión y los derechos humanos, y como tal debe ser tratado, desde la investigación hasta el juicio final».
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