De acuerdo con una valoración de esa entidad, un aumento en la tasa de referencia al 3,5 por ciento, en la búsqueda por controlar la inflación, podría resultar en una disminución del cinco por ciento en los precios promedio de la vivienda, lo cual afectaría a los compradores.
El economista jefe de CHVC, Bob Dugan, señaló al respecto que la economía podría retroceder durante dos trimestres consecutivos en caso de que la banca canadiense se vea obligada a adoptar dicha medida para frenar el crecimiento de los precios al consumidor.
La entidad financiera ya aumentó los tipos desde 0,25 por ciento en marzo de este año a 1,5 en el mes de junio, pero los resultados económicos indican que deberá continuar elevando la cifra.
Tales decisiones podrían traer como consecuencia el desplome en las ventas de inmuebles alrededor de un 34 por ciento, refirió la consultora financiera Bloomberg.
La acción tendrá consecuencias para muchos canadienses e inmigrantes, aunque los más vulnerables serán los que deseen adquirir casa en Canadá por primera vez, quienes deberán acudir a instituciones financieras para solicitar una hipoteca, consideró CHVC.
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