Las conversaciones se iniciaron el pasado jueves en el Centro Cristo Sembrador de Penonomé, en la provincia de Coclé, con la Iglesia Católica como facilitadora.
Sobresalen ocho temas en agenda sobre el alto costo de la vida, el primero de ellos agotado la víspera, aunque con diferencias sobre los márgenes de utilidades de los intermediarios, en torno a la canasta básica familiar ampliada y este martes evalúan los altos precios del combustible.
El acceso a los medicamentos, la crisis en la Caja de Seguro Social, designar el 6,0 por ciento del Producto Interno Bruto al sistema de educación pública y la lucha anticorrupción, reclamos de los colectivos, son otros asuntos pendientes de análisis.
En un mensaje a la nación en cadena nacional de radio y televisión, el mandatario consideró que el momento exige que juntos se encuentren caminos adecuados para procurar el bien común, “porque esta es una responsabilidad de todos los panameños”, remarcó.
Y consideró que como parte de la política de «puertas abiertas», nadie debe ser excluido en un esfuerzo por aportar a la estabilidad que el país y su recuperación económica necesitan.
Al respecto, informó que este martes se reunió con gremios empresariales que solicitan ser incluidos en el diálogo y que además recibirá a productores agropecuarios y agroindustriales para reiterarle a estos últimos que las más recientes decisiones del Ejecutivo no los afectarán.
En ese sentido se refirió a la decisión del Gabinete de eliminar el arancel a productos importados, incluidos en un listado de 72 rubros negociados en la mesa de diálogo, lo cual equivale a una rebaja superior al 30 por ciento del costo actual de la canasta básica.
Cortizo aseveró que su administración respeta el derecho a manifestarse tal como lo establece la Constitución, sin alteraciones del orden público, violación de derechos a terceros y mucho menos actos de vandalismo.
Sobre la actual situación comentó que los bloqueos de carreteras afectan a todos y ponen en riesgo la salud de personas, atentan contra el empleo, además de encarecer el costo de los alimentos.
El mandatario enfatizó que “el diálogo es la mejor fórmula para entendernos, resolver los problemas y que todos contribuyamos a la paz social que nos caracteriza”.
En su comparecencia enumeró acciones adoptadas bajo la presión popular, entre ellas reducir para toda la ciudadanía a 3,25 dólares el precio del galón (3,78 litros) de combustible- el más bajo en Centroamérica, dijo- y una propuesta legislativa que elimina anteriores normas sobre incentivos fiscales para el fomento del turismo, cuestionadas por la sociedad.
El Gobierno puso en vigor varias de esas iniciativas, pero las medidas no calman aún el descontento en las calles y algunos cierres viales, aunque dirigentes de los originarios de la comarca Ngabe Bugle, del oriente de Chiriquí, indicaron liberar los puntos de bloqueos en su territorio.
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